El protagonista, Goliadkin, es presentado desde un primer momento como una persona enferma, casi excluida socialmente (sus compañeros se ríen de él constantemente), insegura y acomplejada. Su inseguridad es tal que para tomar cualquier tipo de decisión puede tardar horas y cuando finalmente la toma se arrepiente en menos de diez segundos. Una persona que reúne estos rasgos atrae inmediatamente la atención del lector que empatiza con él e inmediatamente se pone de su parte.
La soledad en la que vive unido a esa enfermedad que parece tener, llevan a Goliadkin a buscarse un amigo (invisible): su doble. Lo que podría parecer una forma de autoayuda acaba convirtiéndose en una terrible amenaza para nuestro protagonista quien ve en ese otro "yo" a una persona que quiere arrebatarle lo poco que tiene, incluido el trabajo. Y es que ese "suplantador" engatusa rápidamente a los superiores de Goliadkin haciéndolo caer en desgracia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario